26.5.09
25.5.09
Reflexión de un fan de Javier Barría mientras escucha por segunda vez su nuevo disco
¡Puta la hueá la raja!
24.5.09
Antony and the Johnsons - The Crying Light
Antony Hegarty es un personaje difícil de abordar. Su infinito carisma hace que hablar sobre él se convierta en una tarea tan afanosa como no caer en inmediatos elogios hacia su obra. Y es que I Am a Bird Now (05), no fue sólo un lapsus de brillantez, sino el último eslabón de una epopeya en búsqueda de la excelencia, emprendida por un tipo confiado en poder encontrarla. En The Crying Light se intuyen grandes aspiraciones y una insaciable apetencia de perfección, por más que se traten de cubrir con un velo de minimalismo y austeridad.
Este no es un disco para amantes de lo inesperado. La crítica fácil sería encasillarlo como la cansina repetición de un chiste viejo y gastado, pero adoptar esa postura supone olvidar un rasgo sustancial: en un panorama infestado de clones, Antony and the Johnsons se erige como una apuesta genuina y dueña de un sello cada vez más característico. Una impronta que necesita ser depurada, en vista de los magníficos resultados que es capaz de obtener.
Eso explica que la espesa voz de Hegarty continúe cantando con doliente aflicción y que “Another world” tenga claros resabios de “Hope there’s someone”. No es autoplagio, es la convicción de quien cree hacer lo correcto y se mantiene firme en su postura. Hay tanta certidumbre en The Crying Light que los invitados se tornan prescindibles y sólo la colaboración de Nico Muhly (Björk, Bonnie “Prince” Billy) en los arreglos de cuerdas cobra verdadera relevancia. Su aporte intensifica el dramatismo que el extravagante protagonista de esta placa busca sin claudicar.
Por segunda vez consecutiva, la firma de Antony and the Johnsons figura en un álbum cuya calidad se condice con su exigencia. Canciones como “Aeon”, “Kiss my name” y “Everglade” pueden ser disfrutadas por separado, pero su abrumadora belleza demanda que sean degustadas en bloque, para no sucumbir ante la avalancha emocional que implican. Éste no es sólo un disco, es también la buena noticia de saber que hay un genio que camina en una calle asfaltada por él mismo. Y sin mirar hacia los lados.
Este no es un disco para amantes de lo inesperado. La crítica fácil sería encasillarlo como la cansina repetición de un chiste viejo y gastado, pero adoptar esa postura supone olvidar un rasgo sustancial: en un panorama infestado de clones, Antony and the Johnsons se erige como una apuesta genuina y dueña de un sello cada vez más característico. Una impronta que necesita ser depurada, en vista de los magníficos resultados que es capaz de obtener.
Eso explica que la espesa voz de Hegarty continúe cantando con doliente aflicción y que “Another world” tenga claros resabios de “Hope there’s someone”. No es autoplagio, es la convicción de quien cree hacer lo correcto y se mantiene firme en su postura. Hay tanta certidumbre en The Crying Light que los invitados se tornan prescindibles y sólo la colaboración de Nico Muhly (Björk, Bonnie “Prince” Billy) en los arreglos de cuerdas cobra verdadera relevancia. Su aporte intensifica el dramatismo que el extravagante protagonista de esta placa busca sin claudicar.
Por segunda vez consecutiva, la firma de Antony and the Johnsons figura en un álbum cuya calidad se condice con su exigencia. Canciones como “Aeon”, “Kiss my name” y “Everglade” pueden ser disfrutadas por separado, pero su abrumadora belleza demanda que sean degustadas en bloque, para no sucumbir ante la avalancha emocional que implican. Éste no es sólo un disco, es también la buena noticia de saber que hay un genio que camina en una calle asfaltada por él mismo. Y sin mirar hacia los lados.
Subido en Super45.net en mayo de 2009
23.5.09
Oportuna y oportunista
Una de las mejores movidas del sello Sub Pop para esta temporada es la edición de Enter The Vaselines. Este álbum doble incluye en el primer cedé una versión remasterizada del compilatorio The Way of The Vaselines: A Complete History y en el segundo, tomas en vivo y demos de los escoceses. Y todo, mientras la reformada banda rota por festivales en Europa y Estados Unidos, cantándole a un público que no los conocería si no fuera por el MTV Unplugged in New York de Nirvana.
Kurt Cobain siempre mencionó The Vaselines al hablar de sus compositores favoritos y ellos, aprovechándose de su estética inocente, efectivamente fueron autores de excelentes canciones, que podían llevar al límite la mordacidad y la acidez. Valga como ejemplo 'You Think You're A Man', la mejor letra que una chica -con ganas de aniquilar tu orgullo masculino- podría dedicarte.
Kurt Cobain siempre mencionó The Vaselines al hablar de sus compositores favoritos y ellos, aprovechándose de su estética inocente, efectivamente fueron autores de excelentes canciones, que podían llevar al límite la mordacidad y la acidez. Valga como ejemplo 'You Think You're A Man', la mejor letra que una chica -con ganas de aniquilar tu orgullo masculino- podría dedicarte.
Ignorancia supina
He compartido música con muchos amantes del hardcore. Fans de Minor Threat, de Fugazi, de Bad Brains, de Youth of Today, etc. No soy un letrado en la materia, pero tampoco soy un lego. Mi problema empieza con las derivaciones del género (tengo serios conflictos con tener que etiquetarlo todo) y ahí es cuando me pierdo. El boom del emo, en la primera mitad de esta década, hizo que escuchara a un montón de bandas, pero ninguno de mis conocidos jamás me habló sobre Cap'n Jazz y yo nunca atiné a indagar en la génesis de este movimiento. Gran error.
Si quiere saber acerca de ellos y sobre por qué la vida es mejor después de escucharlos, sólo basta con darse una vuelta por su página en Wikipedia o con descargar su increíble antología doble. En caso de que usted ya los conozca, perdóneme. Mientras me revuelco en mi ignorancia supina, seguiré intentando cantar de corrido el brillantetrabalenguas juego de palabras de 'In The Clear'.
Canine ate seven sick five year olds!!! ♫
Si quiere saber acerca de ellos y sobre por qué la vida es mejor después de escucharlos, sólo basta con darse una vuelta por su página en Wikipedia o con descargar su increíble antología doble. En caso de que usted ya los conozca, perdóneme. Mientras me revuelco en mi ignorancia supina, seguiré intentando cantar de corrido el brillante
Canine ate seven sick five year olds!!! ♫
22.5.09
Radio a pilas, parrilla y cerveza
Cómo me aprendí las canciones de Leo Dan siempre será un misterio sin resolver.
21.5.09
Beat Part
The only people for me are the mad ones, the ones who are mad to live, mad to talk, mad to be saved, desirous of everything at the same time, the ones who never yawn or say a commonplace thing, but burn, burn, burn, like fabulous yellow Roman candles exploding like spiders across the stars, and in the middle, you see the blue center-light pop, and everybody goes ahh...
Jack Kerouac
Feriado
Llego a mi casa a las 10 de la mañana. No entro, sino que paso directo al patio, donde me siento a fumar de esto y de lo otro. Estoy una hora completa dándole vueltas a una conversación que tuve anoche, pensando en lo equivocado que está uno en la vida cuando cree que se las sabe todas. Sale mi mamá a colgar ropa, me saluda y me reta por haber pasado la noche afuera tan desabrigado. Me siento como un niño de seis años, pero me encanta que me cuiden, así que parto a mi pieza a buscar algo para ponerme encima del chaleco delgadísimo que llevo. Miro mi cama, tentadora como siempre. Miro algunos CDs nuevos, con la satisfacción de que tendré tiempo para ellos. Miro mi PC, encendido desde hace quién sabe cuántas horas. Pobre. Me pongo a escribir un poco. Se me ocurre que sólo son idioteces, pero no me importa parecer un tarado de esos que cuentan su vida en el blog y -de repente- me acuerdo de esa banda que me mostró un amigo y que me hizo pensar en lo agradable que sería escucharlos en la mañana. Paso las canciones del grupo a mi mp4 y me pongo una parka negra gigante. Ahora parezco más oso de lo habitual. Bacán. Creo que saldré a fumar otra vez.
20.5.09
18.5.09
16.5.09
Coleccionista de ruidos
Merrill Garbus juntó sonidos en su grabadora personal y usó gran parte de ellos en BiRdBrAiNs, su debut bajo el seudónimo tUnE-YaRdS. Un proyecto donde es ama y señora, dándose incluso el lujo de utilizar la tos de un niño para marcar el pulso de una de sus canciones: 'She's Not Jamaican', lo más cercano al reggaeton que ha estado el freak folk de baja fidelidad.
Japandroids: Prueba de fuego
Los canadienses Brian King y David Prowse deseaban formar un power trío, pero se aburrieron de buscar el eslabón faltante, así que decidieron cantar ellos mismos mientras tocaban guitarra y batería. Así nació Japandroids, la prueba de fuego que debes superar antes de dar por finiquitada tu adolescencia. Cada canción de este dúo parece una oda a ese momento de la vida en que tus dos prioridades son besar chicas y pasarlo bien con tus amigos. Considérate maduro si las escuchas y no te dan ganas de volver al pasado.
Con un par de EPs cargados de noise, garage y tintes punk, el tándem comenzó a destacarse en las noches de su natal Vancouver. Pero ni el más optimista podría haber presagiado lo que vino después: el descomunal Post-Nothing (Unfamiliar, 2009), un disco debut que supera a cualquier inyección de adrenalina. Editada a fines de abril, la placa –de apenas ocho cortes– habla por sí sola y nos dice que aquí hay algo grande a punto de explotar. Como si se tratara de quinceañeros atrapados en cuerpos de adultos, Japandroids es el recordatorio más efectivo (y frenético) de que la pubertad es sólo un estado mental.
Suena como: No Age, Wavves, Women
www.myspace.com/japandroids
Con un par de EPs cargados de noise, garage y tintes punk, el tándem comenzó a destacarse en las noches de su natal Vancouver. Pero ni el más optimista podría haber presagiado lo que vino después: el descomunal Post-Nothing (Unfamiliar, 2009), un disco debut que supera a cualquier inyección de adrenalina. Editada a fines de abril, la placa –de apenas ocho cortes– habla por sí sola y nos dice que aquí hay algo grande a punto de explotar. Como si se tratara de quinceañeros atrapados en cuerpos de adultos, Japandroids es el recordatorio más efectivo (y frenético) de que la pubertad es sólo un estado mental.
Suena como: No Age, Wavves, Women
www.myspace.com/japandroids
Publicado en Extravaganza! mayo de 2009
Grammatics: Maximalismo sensible
La energía se transforma y nunca se pierde. Por eso fue necesaria la muerte de dos proyectos para que naciera Grammatics. Primero cayó Colour of Fire, una de las respuestas británicas a The Fall of Troy, que gozó cierto éxito hasta su término, en 2005. Luego vendría Grammar, el bar que el vocalista Owen Brinley fundó al quedarse sin banda. El negocio siempre marchó bien, pero el instinto creativo pudo más y el cantante –junto a su socio Dominic Ord– reclutó a un bajista y a una chelista para formar un grupo.
Ahora son cuatro cabezas, compartiendo su gusto por el rock inglés de corte más dramático y su desprecio hacia la extrema simpleza sonora de Arctic Monkeys (y todos sus émulos). Esto, sumado a un bagaje post-hardcore todavía patente, convierte a Grammatics –y a su debut homónimo, editado en marzo– en una criatura maximalista, pero rebosante de sensibilidad.
Suena como: Ra Ra Riot, Bright Eyes, Foals
www.myspace.com/grammatics
Ahora son cuatro cabezas, compartiendo su gusto por el rock inglés de corte más dramático y su desprecio hacia la extrema simpleza sonora de Arctic Monkeys (y todos sus émulos). Esto, sumado a un bagaje post-hardcore todavía patente, convierte a Grammatics –y a su debut homónimo, editado en marzo– en una criatura maximalista, pero rebosante de sensibilidad.
Suena como: Ra Ra Riot, Bright Eyes, Foals
www.myspace.com/grammatics
Publicado en Extravaganza! mayo de 2009
15.5.09
Dent May - The Good Feeling Music Of Dent May & His Magnificent Ukelele
Uno de los peores errores que puede cometer un artista es tomarse demasiado en serio a sí mismo. Dent May lo tiene tan claro que en éste, su debut, cuesta dilucidar si estamos ante una humorada o una obra kitsch planteada con sensatez. Sea como sea, lo más complicado es no sucumbir ante el carisma de este peculiar personaje y su inefable ukulele.
Apadrinado por Animal Collective y Rusty Santos, uno de los productores favoritos de los de Baltimore, Dent May grabó esta placa en su humilde casa rodante. Con sencillez y recursos simples, el cantautor se anota una docena de canciones que lo muestran como un híbrido entre el absurdo de Jonathan Richman y la melosidad de Morrissey. Cortes como ‘Howard’, ‘You Can’t Force a Dance Party’ y ‘God Loves You, Michael Chang’ son los pasaportes de esta nueva lumbrera hacia el olimpo de los crooners contemporáneos.
www.myspace.com/dentmay
Apadrinado por Animal Collective y Rusty Santos, uno de los productores favoritos de los de Baltimore, Dent May grabó esta placa en su humilde casa rodante. Con sencillez y recursos simples, el cantautor se anota una docena de canciones que lo muestran como un híbrido entre el absurdo de Jonathan Richman y la melosidad de Morrissey. Cortes como ‘Howard’, ‘You Can’t Force a Dance Party’ y ‘God Loves You, Michael Chang’ son los pasaportes de esta nueva lumbrera hacia el olimpo de los crooners contemporáneos.
www.myspace.com/dentmay
Publicado en Extravaganza! mayo de 2009
P.O.S. - Never Better
A estas alturas, que un músico tenga proyectos en dos estilos diferentes no es una novedad. Lo llamativo es cuando los límites entre uno y otro género se hacen difusos dentro del mismo álbum. Eso ocurre en Never Better, la tercera placa de P.O.S., un guitarrista y cantante punk que se desdobla para convertirse en MC. Y no en cualquiera, sino en uno de los más interesantes del prestigioso colectivo Doomtree.
Esto es hip-hop llevado a su límite. Son beats intensos y líricas embadurnadas de peligrosidad. Hay baterías exaltadas (‘Drumroll’, ‘Purexed’), sampleos de Fugazi (‘Savion Glover’) e incluso los gritos del héroe hardcore Jason Shevchuk (‘Terrorish’). Pero P.O.S. también sabe de rap más puro, como muestra en las explosivas ‘Goodbye’ y ‘Low Light Low Life’. Un álbum indómito y no apto para conformistas.
www.myspace.com/posisruiningmylife
Esto es hip-hop llevado a su límite. Son beats intensos y líricas embadurnadas de peligrosidad. Hay baterías exaltadas (‘Drumroll’, ‘Purexed’), sampleos de Fugazi (‘Savion Glover’) e incluso los gritos del héroe hardcore Jason Shevchuk (‘Terrorish’). Pero P.O.S. también sabe de rap más puro, como muestra en las explosivas ‘Goodbye’ y ‘Low Light Low Life’. Un álbum indómito y no apto para conformistas.
www.myspace.com/posisruiningmylife
Publicado en Extravaganza! mayo de 2009
Milkyway - In Love EP (2002)
Este EP es uno de los primeros antecedentes de la existencia de La Casa Azul. Si bien fue editado en 2002, algunas de sus canciones fueron creadas en 1995 y evidencian la temprana maestría de Guille Milkyway en el arte de hacer pop luminoso y de sentimiento retro. Eso sí, y como curiosidad, todas las letras son en inglés.
Brother Ali - The Truth Is Here EP
Fuera de lo pintoresco que resulta un hip-hopero albino y musulmán, Brother Ali se las arregla para destacar por lo que de verdad importa: rimas certeras y una fluidez sobrecogedora al entregarlas. En este generoso epé de nueve pistas, el MC de Minneapolis hace un llamado a la calma para quienes ansían escuchar su nuevo largaduración, pero le sale el tiro por la culata. The Truth Is Here es una placa de tan alto vuelo que, al terminar, sólo deja pidiendo por más.
De la mano de Ant, su talentoso productor, el rapero más blanco de todos sigue practicando el arte de la honestidad brutal. Tan autobiográfico y descarnado como siempre, Brother Ali pasa de lo humano (‘Real as Can Be’) a lo divino (‘Good Lord’) y de lo triunfante (‘Palm the Joker’) a lo modesto (‘Begin Here’), con una facilidad que deslumbra. Y lo mejor es que esto es sólo un adelanto.
www.myspace.com/brotherali
De la mano de Ant, su talentoso productor, el rapero más blanco de todos sigue practicando el arte de la honestidad brutal. Tan autobiográfico y descarnado como siempre, Brother Ali pasa de lo humano (‘Real as Can Be’) a lo divino (‘Good Lord’) y de lo triunfante (‘Palm the Joker’) a lo modesto (‘Begin Here’), con una facilidad que deslumbra. Y lo mejor es que esto es sólo un adelanto.
www.myspace.com/brotherali
Publicado en Extravaganza! mayo de 2009
13.5.09
Los Gatos Negros - Érase una vez en América
La vida de millones de chilenos se divide en dos partes: la penuria de los días de trabajo y el consabido desquite del fin de semana. La falta de plata es el principal problema, uno que se bifurca y ramifica en decenas más. Para sobrellevarlos, abstraerse o enfrentarlos, la jarana actúa como el remedio universal. Es una realidad esquizofrénica, pero que -al ser prácticamente irrefrenable- está arraigada a la identidad nacional. Y es ahí cuando bandas como Los Gatos Negros, a través de un rock frontal y asequible, surgen para capturar el panorama. Érase una vez en América es la tercera producción de este grupo nacido el 2002. Que aparezca bajo etiqueta CFA (el sello de los imprescindibles Fiskales Ad-Hok) no es mera casualidad, sino el reflejo de que la conciencia social sigue siendo el leitmotiv de muchos músicos. Esto explica también la gran cantidad de invitados en este elepé, entre los que destacan Camilo Salinas, Álvaro España y el saxofonista Keko Hermosilla.
Alejadas del panfleto fácil, las letras del disco dan cuenta del agridulce cotidiano en el que transcurre la existencia de la gran mayoría, ésa que yace oculta entre la indiferencia de los medios y los pisoteos de la clase dominante. Ahí, Los Gatos Negros encuentran inspiración, para desplegar historias crudas con total honestidad. ‘Arleen’ habla sobre una chica pobre que logra terminar la universidad, pero que ve truncadas sus ilusiones laborales por culpa de "el prejuicio habitual de la presencia personal". En ‘Delincuencia’, el trío alude a la opresión de los que no tienen voz en las noticias y -para confirmar su desprecio a las mentiras de los informativos- Edo Agrela canta "CNN te miente como quiere, CNN te mete todo el pene" en ‘CNN’. La artillería del trío también alcanza para atacar a los ricos que se drogan con receta médica, mientras apuntan con el dedo al narcotráfico en las poblaciones (’Pastillas’) y para embestir contra la homofobia en ‘Destápate’.
Basta una pizca de reflexión para darse cuenta de que nada de esto es inventado. Pero Érase una vez en América es un álbum colmado de idiosincrasia chilena y eso quiere decir que no todo puede ser tan terrible. O quizás sí, pero al menos hay suficientes cojones como para encararlo. Por eso las canciones de esta placa expelen aroma a juerga y cantina, una emanación que se vigoriza en las pistas más fiesteras, como ‘Ven Latina’, ‘Pasiones y Traiciones’ y ‘El Amargo Sabor (Se Pasa con Vino, No con Amor)’. Es que darse cuenta de la crueldad del sistema no significa que sea necesario abandonar el trasnoche, ni dejar de empinar el codo al ritmo del blues y el rocanrol.
MySpace
Alejadas del panfleto fácil, las letras del disco dan cuenta del agridulce cotidiano en el que transcurre la existencia de la gran mayoría, ésa que yace oculta entre la indiferencia de los medios y los pisoteos de la clase dominante. Ahí, Los Gatos Negros encuentran inspiración, para desplegar historias crudas con total honestidad. ‘Arleen’ habla sobre una chica pobre que logra terminar la universidad, pero que ve truncadas sus ilusiones laborales por culpa de "el prejuicio habitual de la presencia personal". En ‘Delincuencia’, el trío alude a la opresión de los que no tienen voz en las noticias y -para confirmar su desprecio a las mentiras de los informativos- Edo Agrela canta "CNN te miente como quiere, CNN te mete todo el pene" en ‘CNN’. La artillería del trío también alcanza para atacar a los ricos que se drogan con receta médica, mientras apuntan con el dedo al narcotráfico en las poblaciones (’Pastillas’) y para embestir contra la homofobia en ‘Destápate’.
Basta una pizca de reflexión para darse cuenta de que nada de esto es inventado. Pero Érase una vez en América es un álbum colmado de idiosincrasia chilena y eso quiere decir que no todo puede ser tan terrible. O quizás sí, pero al menos hay suficientes cojones como para encararlo. Por eso las canciones de esta placa expelen aroma a juerga y cantina, una emanación que se vigoriza en las pistas más fiesteras, como ‘Ven Latina’, ‘Pasiones y Traiciones’ y ‘El Amargo Sabor (Se Pasa con Vino, No con Amor)’. Es que darse cuenta de la crueldad del sistema no significa que sea necesario abandonar el trasnoche, ni dejar de empinar el codo al ritmo del blues y el rocanrol.
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Subido a POTQ.cl en mayo de 2009
8.5.09
Tréboles - Tréboles
Aunque las expectativas muy altas son engañosas y traicioneras, es imposible no tenerlas al ver los créditos del disco debut de Tréboles. Detrás de él, hay tres de los más connotados personajes de la pequeña industria chilena, encargados de dar forma al producto final. Se trata de Marcelo Aldunate, quien fuera director de Rock&Pop en su época de gloria, actual Director Musical del gigante radial Iberoamerican y que -de vez en cuando- oficia como productor (Monik, Camila Moreno, Sónica). Otro nombre conocido es el de Hernán Rojas, ingeniero en sonido cuyo currículum incluye a Viena y Lucybell. Y, para cerrar el trío, la masterización estuvo a cargo del histórico Gonzalo "Chalo" González (Los Bunkers, Los Prisioneros, Tiro de Gracia y un larguísimo etcétera).
Pocos grupos cuentan con semejante nivel de apoyo en su ópera prima. Para evitar cualquier suspicacia, y por si no te suena el nombre de Tréboles, te contamos que no se trata de unos aparecidos. El quinteto existe desde el 2004, funcionando en primera instancia como Trébol, hasta cambiarlo a plural el año pasado. En un comienzo, el estilo del grupo era una mezcolanza de influencias ligadas al rock clásico de Cream, Jimi Hendrix y Grand Funk Railroad. La impronta de la banda amplió su registro cuando aparecieron los teclados y los sintetizadores, pasando del sabor a Woodstock a tener resabios ochenteros y de indie contemporáneo. Ese mosaico es, precisamente, lo que se escucha en este elepé homónimo.
Tréboles nos muestra a un combo de actitud festiva y sin rodeos. La decena de pistas que incluye el disco son, en su mayoría, una invitación al esparcimiento y al baile. Es power pop con guitarras que evidencian un background mucho más pesado y progresivo, pero que -por suerte- no temen ceder decibeles en orden de animar la juerga. Tanto así que en ciertos pasajes, especialmente en el single ‘Like I Do’, casi hacen pensar en la banda como exponentes del muy en boga nu-rave. Pese a que todas estas referencias pueden parecer confusas, no hay que complicarse: estamos ante un registro coherente y bien estructurado.
En tiempos en que la originalidad no existe y lo que importa es ser auténtico, Tréboles se las ingenian para salir airosos de la prueba del primer álbum, sin reparo alguno en tributar a sus mentores. Cortes como ‘Quieres Bailar’, ‘La Única’ y ‘Soy Animal’ hablan de cinco tipos capaces de ser discotequeros, urgentes y emotivos en una misma placa. Sin perder su norte (crear música accesible al público), la banda parte con el pie derecho, a través de un trabajo auspicioso, apoyado por una producción de alto vuelo. Un buen ejemplo de cómo aprovechar los recursos, cuando se tienen a la mano.
www.treboles.cl
Pocos grupos cuentan con semejante nivel de apoyo en su ópera prima. Para evitar cualquier suspicacia, y por si no te suena el nombre de Tréboles, te contamos que no se trata de unos aparecidos. El quinteto existe desde el 2004, funcionando en primera instancia como Trébol, hasta cambiarlo a plural el año pasado. En un comienzo, el estilo del grupo era una mezcolanza de influencias ligadas al rock clásico de Cream, Jimi Hendrix y Grand Funk Railroad. La impronta de la banda amplió su registro cuando aparecieron los teclados y los sintetizadores, pasando del sabor a Woodstock a tener resabios ochenteros y de indie contemporáneo. Ese mosaico es, precisamente, lo que se escucha en este elepé homónimo.
Tréboles nos muestra a un combo de actitud festiva y sin rodeos. La decena de pistas que incluye el disco son, en su mayoría, una invitación al esparcimiento y al baile. Es power pop con guitarras que evidencian un background mucho más pesado y progresivo, pero que -por suerte- no temen ceder decibeles en orden de animar la juerga. Tanto así que en ciertos pasajes, especialmente en el single ‘Like I Do’, casi hacen pensar en la banda como exponentes del muy en boga nu-rave. Pese a que todas estas referencias pueden parecer confusas, no hay que complicarse: estamos ante un registro coherente y bien estructurado.
En tiempos en que la originalidad no existe y lo que importa es ser auténtico, Tréboles se las ingenian para salir airosos de la prueba del primer álbum, sin reparo alguno en tributar a sus mentores. Cortes como ‘Quieres Bailar’, ‘La Única’ y ‘Soy Animal’ hablan de cinco tipos capaces de ser discotequeros, urgentes y emotivos en una misma placa. Sin perder su norte (crear música accesible al público), la banda parte con el pie derecho, a través de un trabajo auspicioso, apoyado por una producción de alto vuelo. Un buen ejemplo de cómo aprovechar los recursos, cuando se tienen a la mano.
www.treboles.cl
Subido a POTQ.cl en abril de 2009
7.5.09
Talón de Aquiles
Te lo dije: siempre supe que tenías un punto débil. Y es que nadie puede ser tan rudo.
2.5.09
A armarse de paciencia
'Low Light Low Life' de P.O.S. es uno de mis tracks predilectos del año. Entre las cosas que más me gustan de la canción está el glorioso momento en que Dessa toma el micrófono y le imprime toda su intensidad. Esos segundos en los que ella rapea me dejan con la piel de gallina. Así que busqué más y encontré False Hopes, el único registro en solitario que posee esta emcee, escritora y poetisa. Se trata de un esperanzador mini álbum, editado el 2005, como adelanto de un largaduración que todavía no aparece y que -de salir- tiene el potencial para ser un gran disco. Lo certifican las cinco excelentes pistas que contiene el epé.
Dessa - Mineshaft
Imperativo
Siempre es un agrado saber que una de tus bandas favoritas lanza nuevo material. Hace un par de días, escuché 'I Want You To Know', el primer adelanto del próximo álbum de Dinosaur Jr. El disco llevará por nombre Farm y aparecerá -por primera vez vía Jagjaguwar- el 22 de junio. Como es imposible obviar que amo a este grupo y que no puedo desdoblarme de mi fanatismo, afirmo con toda tranquilidad que es un temazo increíble y que hay que degustarlo. Es una orden.
Dinosaur Jr. - I Want You To Know
Debe ser por la guitarra
Creo que hay cierto grado de similitud entre esta canción y las de In Rainbows.
Post War Years - That's All
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