Si dijera que moría de ganas de que Van She lanzara su debut, me convertiría en un mentiroso. A pesar de que me gustaban sus singles y remezclas, este cuarteto australiano nunca me quitó el sueño, por lo que pude escuchar V, el disco en cuestión, sin ansias ni ideas preconcebidas. Fue mejor así, porque me encontré completamente desprevenido ante una de las mejores óperas primas del año y lo único que he hecho ha sido disfrutarla.
El factor sorpresa es mi copiloto.
El factor sorpresa es mi copiloto.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario