26.3.12

Madonna - MDNA


Competencia desleal

A demasiada gente le conviene que a Madonna le vaya bien. La agonizante industria tiene en la cantante de 53 años a una de sus redentoras, así que hay organizadores de conciertos, productores, ejecutivos y asesores de todo tipo cruzando los dedos para que “MDNA” sea un éxito. Hasta ahora, el disco ostenta el récord histórico de ser el título de mayor y más rápida preventa en iTunes, una estadística que derivó inmediatamente en el intento de tildar a este regreso como triunfal. Por supuesto, las comparaciones con “Ray of light”, el último álbum trascendente de la solista, no se hicieron esperar.

Pero todas las alabanzas son un reflejo hiperbólico de lo mucho que el mercado fonográfico necesita best sellers, y de que está dispuesto a olvidar la distinción entre cantidad y calidad para construir uno. Porque, cómo negarlo, el pop y el rock están llenos de consignas y slogans fabricados para enganchar y ser repetidos, en una estrategia similar a la de una campaña política. La nueva frase de moda será, entonces, que “MDNA” es el retorno de la “chica material” a su mejor forma, pese a que ya en el aburrido primer single (“Give me all your luvin’”) se notaba lo lejos que está de ser provocadora como en “Erotica” o, al menos, refrescante como en esa etapa primigenia compilada en “The immaculate collection”.

Y no es que Madonna haya perdido la magia por completo. Aún puede jactarse de que este duodécimo trabajo suyo goza de buena factura, la marca de fábrica de su discografía, como también de tener uno que otro acierto de la mano del productor William Orbitt (el mismo de “Ray of Light”), como “Love spent” o “Falling free”. Fuera de eso, lo nuevo de la que millones llaman reina del pop –otro pegajoso invento de asesores de prensa- resulta más triste que glorioso. Es el dramático relato de una diva veterana que se autoimpuso competir contra chicas con la mitad de su edad y un cuarto de su talento.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario